Finaliza primer Taller Nacional de Comunicación Comunitaria
Cómo hacer más y mejor comunicación comunitaria para mayor participación, diálogo y consenso en nuestra sociedad, para seguir construyendo un país mejor entre todos, fue el centro de atención de los debates del Taller Comunicación Comunitaria: “Retos y perspectivas en el escenario cubano actual” que concluyó este viernes en esta capital, con la presencia del presidente del Instituto de Información y Comunicación Social (ICS), Alfonso Noya Martínez.
Al iniciarse esta última jornada del Taller, la vicepresidenta del ICS, Belkys Pérez Cruz reiteró que la comunidad es el espacio ideal para otorgarle una mirada diferente a la Comunicación de Crisis y contó las experiencias del oriente del país durante los recientes fenómenos naturales en los cuales el apoyo popular fue imprescindible.
Pérez Cruz señaló igualmente la relevancia de la comunicación persona a persona como una red colaborativa en la que la prensa también forma parte.
La verdad, herramienta fundamental durante una crisis
En la conferencia «Comunidad y enfrentamiento a los desastres de origen natural», la Dra. C. Ana Teresa Baldía hizo énfasis en el papel movilizador de los medios en la gestión de la comunicación de crisis y alertó sobre las prácticas comunicativas adecuadas en situaciones excepcionales.
La destacada docente se refirió a la sinergia de los medios digitales y los medios tradicionales para mantener a la población informada ante la ocurrencia de fenómenos meteorológicos.
También mencionó otros medios como radioaficionados, altoparlantes, salas de video, boletines, plegables, y las organizaciones políticas, de masas y sociales para el trabajo persona persona, en la cuadra, el barrio, la zona de defensa, los consejos populares.
«La gestión de la comunicación de riesgos tiene esencialmente un carácter preventivo», puntualizó Badía Valdés. Señaló, además, que todas las instituciones, organismos y organizaciones deben poseer sus Manuales para la gestión de la comunicación de crisis.
La experta en Comunicación recalcó la importancia de comunicar mejor la ciencia, con el propósito de que la sociedad adquiera una mayor cultura sobre este asunto.
La planeación de las acciones de prevención debe ser estratégica, direccionada a los diferentes grupos etáreos y a las características específicas de cada comunidad. Para ello, dijo, es primordial realizar un diagnóstico y luego una evaluación de la comunicación realizada.
En medio de la cobertura periodística de un desastre es esencial centrarse en las causas y sobre todo, en los riesgos que de él se pueden derivar.
Es clave la designación de los voceros en las comunidades, decir lo que sucede en tiempo real, la segmentación de los públicos para que la información llegue a todos de modo correcto.
La comunicación comunitaria constituye pilar fundamental para la gestión exitosa de la comunicación de crisis, evitar daños materiales y humanos. El contexto debe signar el desarrollo de todas las estrategias y medidas que se tomen en situaciones de crisis y en la poscrisis.
La comunidad, factor esencial
Los consejos populares de la Lisa, Plaza de la Revolución, El Cotorro y las provincias de Las Tunas y Sancti Spíritus expusieron sus experiencias en la gestión de la comunicación comunitaria.
Las intervenciones se centraron en las acciones que se realizan para transformar las comunidades y responder a las necesidades de los vecinos en los tiempos tan complejos que vivimos.
En estos territorios prevalece el uso de las plataformas digitales para informar y aclarar inquietudes, así como el diálogo directo con el pueblo. En las exposiciones se mostraron significativos avances gracias al empeño de las autoridades y la población.
Intercambio enriquecedor
En el debate, la integrante del equipo redactor de la Ley 162 “De Comunicación Social”, Elsa Agüero, hizo referencia a la necesidad de estudiar lo que establece la norma sobre la comunicación comunitaria. La experta destacó la importancia de la articulación entre las instituciones y las comunidades para lograr una comunicación efectiva.
El presidente del instituto, Alfonso Noya, explicó que la combinación de la teoría y la acción es primordial. “El desafío es grande porque el tiempo es poco para multiplicar el conocimiento y el contexto es complejo”.
Noya Martínez dijo también que todos tenemos la responsabilidad de lograr el consenso, pues el diálogo es una necesidad mayor. “La Ley deja claros los derechos de las personas y es necesario hacérselos entender”, enfatizó. Igualmente convocó a que este tipo de espacios se realice en todas las provincias del país y a lo largo de todo el año.
Durante estos dos días se han intercambiado experiencias y conocimientos necesarios para comprender cómo, desde de la comunicación comunitaria, podemos contribuir al desarrollo del país. Este primer Taller Nacional es una oportunidad para socializar mediante el debate ameno y desenfadado aquellas prácticas que demuestran que la Ley no se convertirá en letra muerta.